Cossette López favoreció el fraude contra varios precandidatos de Ana García en elecciones primarias, según investigación
Una investigación de Reporteros de Investigación narra una trama de manipulación electoral en las elecciones primarias del Partido Nacional, donde la consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, habría favorecido a sectores vinculados a Nasry “Tito” Asfura en perjuicio del movimiento Avanza, encabezado por Ana García de Hernández.
El reportaje describe cómo las viejas rivalidades personales entre ambas figuras —que datan de los años en que López trabajó en el Congreso Nacional— se trasladaron al escenario electoral interno, afectando el resultado de varias candidaturas del movimiento de García.
Antecedentes: una relación marcada por tensiones
Según la publicación, Cossette López conoció a Juan Orlando Hernández cuando trabajó en el Congreso Nacional en la década del 2010.
La cercanía entre ambos habría generado incomodidades con Ana García, esposa de Hernández, quien llegó al punto de confrontar a Cossette personalmente en una de las áreas del Congreso.
Un testigo citado por Reporteros de Investigación narró cómo García recurrió a la violencia contra López, acto que debió ser detenido por personal legislativo.
Tras aquel episodio, López fue rotada en la estructura política nacionalista, convirtiéndose en secretaria general de la Alcaldía del Distrito Central durante la gestión de Ricardo Álvarez.
En ese cargo tuvo participación administrativa en períodos marcados por escándalos de corrupción, como el caso del fallido Trans 450.
Del conflicto personal al político
El conflicto entre López y Ana García resurgió en el proceso interno de 2025, cuando Cossette López presidió el CNE y Ana García lanzó su precandidatura presidencial por el movimiento Avanza.
De acuerdo con el reportaje, los seguidores de García denunciaron que López utilizó su posición para obstaculizar candidaturas del movimiento Avanza y favorecer a aspirantes afines a Asfura, el otro precandidato nacionalista.
La investigación indica que la rivalidad entre ambas terminó influyendo directamente en el proceso electoral, pues la consejera López habría actuado como un “factor determinante” en la validación de actas y decisiones administrativas del CNE que perjudicaron las candidaturas afines a García en varios departamentos, incluyendo Intibucá, Cortés, Colón y Choluteca.
Entre los casos más notorios se menciona el del precandidato Edwin Reynaldo Lindo en Namasigüe, Choluteca.
En un primer escrutinio especial realizado el 4 de abril de 2025, el CNE ratificó el triunfo de Lindo. Sin embargo, apenas tres días después, el 7 de abril, apareció como ganador Cirilo García, candidato del entorno de Asfura.
El reportaje explica que los seguidores de Lindo protestaron frente al CNE exigiendo el respeto al voto popular, al considerar que la reversión del resultado fue producto de una maniobra política dirigida desde la consejería de López.
«Pese a que los manifestantes hicieron un llamado público a Cossette López en su condición de presidenta del CNE y representante del Partido Nacional en el órgano electoral, López ignoró a sus correligionarios. Fueron atendidos por los consejeros Ana Paola Hall y Marlon Ochoa», señala el informe.
La presión ciudadana llevó a un segundo escrutinio especial, el 24 de junio, que nuevamente confirmó el triunfo de Lindo y fue finalmente publicado en el Diario Oficial La Gaceta.

La resolución que Cossette López no firmó
No obstante, el documento oficial del CNE —según constató Reporteros de Investigación— no fue firmado por Cossette López, sino únicamente por los consejeros Ana Paola Hall y Marlon Ochoa.
López, pese a presidir la institución durante el proceso, evitó estampar su firma en la resolución final que devolvía la victoria a Lindo, lo que sugiere que su posición inicial había favorecido al candidato que pretendía reemplazarlo fraudulentamente.

El caso de Namasigüe se convirtió en emblema de la disputa, y aunque finalmente se restituyó el triunfo de Lindo, las denuncias de manipulación dejaron al descubierto cómo los intereses personales y políticos incidieron dentro del máximo órgano electoral.
Una rivalidad que reconfiguró el nacionalismo
El reportaje también contextualiza cómo Cossette López fue defendida públicamente por Nasry Asfura tras recibir ataques políticos, e incluso lideró movilizaciones en su respaldo bajo el lema de “defensa de la democracia”.
Ana García, por su parte, se mantuvo al margen de esas manifestaciones, mientras sus seguidores acusaban al CNE de haber “saboteado” su movimiento.
A juicio de los analistas consultados, el episodio muestra el grado de deterioro institucional dentro del Partido Nacional, donde las viejas alianzas, las rivalidades personales y las redes de poder heredadas siguen influyendo en los procesos internos.
La investigación concluye que las decisiones tomadas bajo la presidencia de Cossette López en el CNE tuvieron efectos directos en la configuración del poder interno del Partido Nacional, afectando a los precandidatos del movimiento Avanza y consolidando la influencia del bloque político cercano a Nasry Asfura.
